Como sabemos, el bebé desarrolla primero el lenguaje receptivo antes que el hablado, pero pese a que no dice palabras, se las ingenia para expresarse. Y aunque tiene dificultad para imitar los sonidos, los adultos pueden ayudarlo en el proceso de comunicación.
A través de variadas formas los padres pueden incentivar a su hijo a desarrollar el lenguaje. Y deben tener en cuenta que toda actividad puede convertirse en una sesión de aprendizaje, muy divertida para ambos.
Consejos para ayudar al bebé a hablar:
Nombra las cosas:
Lo ideal es nombrar constantemente a las personas y los objetos para que comience a identificarlos.
También puedes poner su mano en alguna parte del cuerpo diciendo su nombre.
Escúchalo:
Así como tú le hablas, haz un esfuerzo por entenderlo y dejar que él te converse, además de responderle.
Concéntrate en los conceptos:
Puedes ayudarlo a conocer ciertos conceptos como los siguientes:
- Caliente y frío: cuando tome su mamadera, explícale que es tibia, calentita y cuando tome agua o jugo, le explicas que es frío.
- Arriba y abajo: álzalo suavemente por el aire y después bájalo hasta el piso, mientras le dices que está arriba y luego abajo.
- Adentro y afuera: llena una caja con juguetes y después la vacías.
- Pararse y sentarse: tomándolo de la mano, te pones de pie con él y te sientas.
- Mojado y seco: muéstrale un paño húmedo y una toalla seca.
- Grande y pequeño: puedes poner objetos de distintos tamaños, explicándole que unos son pequeños y otros grandes.
- Explicar la causa-efecto: “salió el sol, por eso es de día”, “cuando salen las estrellas es de noche”, “si muevo el interruptor, se encienden las luces”.
- Los colores: ayúdale a identificar los colores, “ese globo es rojo”, “el auto es verde”, etc.
La información provista en este artículo es de carácter general. Ante cualquier duda es importante que consultes a tu pediatra de cabecera, quien podrá darte las recomendaciones particulares para tu hijo.